Río Tonoa Cubarral Meta |
De la misma manera que el cuerpo humano hasta cierto punto tiene la capacidad de recuperarse después de haber sufrido un accidente o enfermedad, la naturaleza tiene ésta capacidad de volver a su estado natural en proceso denominado regeneración .La regeneración es la capacidad de un ecosistema de recuperarse por sí mismo después de un daño cuando no exista un impedimento para estos procesos naturales. De hecho los daños son normales dentro de los ecosistemas. Por ejemplo en el bosque alto andino se sabe que el oso de anteojos al quebrar plantas para alimentarse, genera espacios de luz que da oportunidad de crecimiento a diferentes especies. O cuando un árbol cae por causa de un vendaval, se vuelve alimento para insectos y deja luz para que otros árboles de menor tamaño continúen creciendo. En el caso de disturbios ocasionales, como incendios forestales, por lo general esta recuperación ocurre, gracias a los componentes del ecosistema que sobreviven. Semillas que han quedado en el suelo o que son transportadas por el viento y animales desde lugares cercanos germinan. Las primeras plantas logran hacer una colonización y con su presencia preparan condiciones de suelo y del ambiente para que otras plantas puedan crecer protegidas. Sucesivamente cada componente vuelve a reaparecer porque la presencia de una especie favorece o complementa el crecimiento de otra en un proceso denominado sucesión natural. En la sucesión cambian las especies a través del tiempo y espacio. Este proceso tarda un buen tiempo, y logra una estabilidad de no haber disturbios que lo impidan. De hecho es bien conocido el sistema de agricultura intinerante, la tumba y quema, que practican los aborígenes en la amazonía o las selvas africanas en donde se dejan abandonados los terrenos para que se recuperen. Sin embargo esto sucede si hay suficiente tiempo de recuperación y porque la población no es muy grande. Cada vez con la disminución de los tiempos de recuperación, y una mayor presión poblacional y por recursos, el peligro inminente es que estos ecosistemas terminen degradándose y perdiendo su capacidad de regeneración.
Arbolito de Quino naciendo en el bosque |
Los procesos de regeneración natural tienen un límite y dependen de la salud misma de un ecosistema es decir que el ecosistema no esté tan impactado que haya perdido esta capacidad. Existen múltiples factores de destrucción tanto naturales como generados por los seres humanos que merecen en sí mismo dedicar un espacio especial para ser explicados, por ejemplo los cultivos ilícitos, la minería, el conflicto armado, las explotaciones forestales ilegales, desecación de humedales , los monocultivos la ganadería , la agricultura, la introducción de especies exóticas, las urbanizaciones legales e ilegales, la introducción de sustancias toxicas, contaminación, etc.
Tumba de Bosque para establecimiento de Pasto Brachiaria |
En el caso de nuestros municipios la población ha aumentado y con esto se han ampliado cascos urbanos y en amplias extensiones como ha sucedido alrededor del planeta, el hombre durante toda su historia ha hecho uso de los recursos naturales para su supervivencia, así taló el bosque para utilizar su madera como fuente de ingresos, material de construcción, y abrir paso a territorios de producción agrícola y ganadera, plantaciones de especies exóticas. La agricultura y la ganadería se mencionan como factores de destrucción de ecosistemas, hay que tener en claro que son base de la supervivencia de nuestras sociedades, y que estas actividades bien manejadas son fuente de empleo y alimentación en nuestras regiones y no necesariamente serían anti ecológicas si se practicaran de una manera inteligente. Lo que deseo señalar es que estas actividades deberían tener un enfoque de sostenibilidad y dejar espacio necesario a áreas protegidas para que los recursos indispensables para la supervivencia de nuestras generaciones presentes y futuras se pudieran garantizar. Nuestras comunidades y sus gobernantes deben entender que los bosques nativos están prestando un servicio de bienestar y protección para los asentamientos humanos. Porque protegen el suelo de la erosión, regulan las fuentes de agua, producen oxigeno y atrapan CO2, son reservas de plantas utilices como medicinales y cosméticas, albergan especies de animales y vegetales, generan espacios de esparcimiento, aprendizaje e investigación entre otros. Cuando se haya tomado conciencia de esto serán efectivas las urgentes acciones de restauración ecológica. Una vez destruidos estos ecosistemas es difícil el retorno a sus estados iniciales, porque antes de cada destrucción, nunca se estudió el bosque o el cuerpo de agua en sí y no se hizo caracterización de flora y fauna ni de las relaciones que ocurrían dentro del mismo. No se entendían si quiera los procesos de generación y propagación de las especies allí existentes.Como un enfermo grave necesita colaboración y cuidado para su recuperación, cuando ha habido muchos daños sobre une ecosistema ya no puede regenerarse solo. Con la intervención de los seres humanos y luego de grandes esfuerzos con inversión de tiempo y recursos se puede llegar a un proceso de restauración ecológica.La restauración ecológica es el esfuerzo por recuperar ecosistemas parecidos a los originales, que permitan la continuidad de los servicios que presta el ecosistema de la región, con el fin lograr que el sistema natural vuelva a su estado de autorregulación.Es necesario entender que el proceso de restauración ecológica es un trabajo conjunto de científicos, los gobernantes y las comunidades. Porque debe haber capacitación y educación ambiental, concertación de intereses, fijación de objetivos, generación y reconstrucción de información e inversión. Las comunidades con el apoyo económico de sus gobernantes, normativo y científico de los grupos de trabajo en restauración, serán directamente las manos activas para llevar a cabo actividades de restauración, monitoreo, y de apoyar condiciones esenciales para tener éxito. Lo primero es definir cuáles fueron las causas de la degradación y detener las actividades que se encuentran afectando a los ecosistemas, seguidamente hay que saber cuál es el punto de partida, es decir el estado actual del ecosistema a recuperar y hacia donde se quiere llegar. Para esto es necesario conocer el ecosistema propio de nuestra región, en donde es necesaria la reconstrucción histórica de las especies autóctonas y del proceso de degradación, el estudio de relictos de vegetación que todavía sobrevivan dentro de la región es un indicio, pero debe conjugarse con reportes históricos y el conocimiento de las comunidades. También se debe establecer las barreras actuales a la restauración para superarlas mediante acciones específicas. En todo el proceso y como cada ecosistema es diferente, no existen recetas terminadas sino modelos que hay que adaptar a las condiciones de cada región, en donde se deben hacer pruebas. Por ejemplo en un estudio del 2004-2007 para la restauración del bosque alto andino de la reserva forestal municipal de Cogua se buscaron estrategias para conectar parches de vegetación nativa y maneras de acelerar la sucesión hacia bosque en potreros abandonados en zonas de protección del municipio desde el ano 1992. Se encontró que las barreras a superar fueron, la falta de semillas de especies de bosque dentro de los potreros, la competencia de los pastos que ya dominan los potreros entre otras cosas porque son capaces de enfrentar las temperaturas extremas coma las heladas, y la insolación directa. En el estudio se encontró que el ataque de curies que se comen los cogollos y las estructruras florales de los árboles jóvenes estaba impidiendo la regeneración. La invasión del retamo espinoso se identificó también como una barrera. Se recomendó proteger los árboles jóvenes sembrados con mallas frente al consumo de los curies, y así hubo mayor éxito en el establecimiento. Ellos comprobaron que mediante el uso de perchas para las aves se favorece la dispersión de las semillas, pero que también además de que las semillas sean dispersas era necesario que hubiese un ambiente en donde tuvieran protección durante la germinación y el establecimiento. Este ambiente se crea mediante especies niñeras que son de crecimiento rápido y que mejoran las condiciones del suelo y clima para el establecimiento de las demás especies. En el estudio se recomendó uso de plantas capaces de resistir la luz solar directa, específicamente lupino bogotensis.
Lupino sp. |
Para finalizar quiero dejarles este link para aquellos que quieran profundizar y tener mayor conocimiento en el tema de la restauración ecológica en general y en los diferentes ecosistemas.
http://www.minambiente.gov.co/documentos/DocumentosBiodiversidad/proyectos_norma/proyectos/230910_guia_tec_res_eco.pdf
Bibliografía
Vargas O. (2007) Guía
Metodológica para la restauración
ecológica del bosque altoandino. Universidad Nacional de
Colombia – Colciencias
Vargas O. (2007)
Estrategias para la restauración ecológica del bosque altoandino, el caso de la reserva forestal
municipal de Cogua, Cundinamarca Grupo de
Restauración Ecológica, Departamento de Biología, Universidad Nacional de
Colombia
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